doi: 10.56294/saludcyt2024781

 

REVISIÓN

 

Effectiveness of supplemented micronutrients on inflammatory markers in patients infected with covid-19. A systematic review

 

Efectividad de micronutrientes suplementados sobre marcadores inflamatorios en pacientes contagiados con covid-19. Una revisión sistemática

 

Valentina Rail1  *, Nicole Seguel1  *, Laura Quezada1  *, Miguel Ángel López-Espinoza1  *

 

1Carrera de Nutrición y Dietética, Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad Adventista de Chile. Chillán, Chile.

 

Citar como: Rail V, Seguel N, Quezada L, López-Espinoza M. Effectiveness of supplemented micronutrients on inflammatory markers in patients infected with covid-19. A systematic review. Salud, Ciencia y Tecnología. 2024;3:781. https://doi.org/10.56294/saludcyt2024781

 

Enviado: 05-12-2023                               Revisado: 28-02-2024                            Aceptado: 30-03-2024                          Publicado: 31-03-2024

 

Editor: Prof. Dr. William Castillo-González  

 

ABSTRACT

 

Introduction: Covid-19 is a recently discovered disease, originating in Wuhan, China at the end of 2019, this virus being responsible for the current pandemic. Due to the spread of the virus, it is of interest to evaluate the available evidence on the role of micronutrient supplementation.

Objective: characterize the effectiveness of supplemented micronutrients on inflammatory markers in Covid-19 patients.

Methods: a systematic review of 3 053 studies was carried out through a search in electronic databases. Studies without variable results, without a comparison group and incomplete information were excluded.

Results: three of which proposed supplementation with vitamin C and D in critically ill patients with Covid-19 were found. Two clinical trials evaluate vitamin D supplementation, showing a decrease in the response variables (interleukin 6, ferritin and CRP), while the third evaluated vitamin C in relation to the admission of patients to the ICU.

Conclusions: with little evidence found, it is not possible to affirm the idea that the micronutrients studied help reduce the concentration of inflammatory markers.

 

Keywords: Covid-19; Inflammatory markers; Vitamin D; Vitamin C; Interleukin-6; Supplementation; Treatment.

 

RESUMEN

 

Introducción: el Covid-19 es una enfermedad recientemente descubierta, originada en Wuhan, China a fines del 2019, siendo este virus responsable de la actual pandemia. Debido a la propagación del virus es de interés evaluar la evidencia disponible sobre el rol de la suplementación de micronutrientes.

Objetivo: caracterizar la efectividad de micronutrientes suplementados sobre marcadores inflamatorios en pacientes con Covid-19.

Métodos: se realizó una revisión sistemática de 3 053 estudios mediante una búsqueda en bases de datos electrónica. Se excluyeron los estudios sin variables resultados, sin grupo de comparación e información incompleta.

Resultados:  se encontraron tres de los cuales plantearon suplementación con vitamina C y D en pacientes críticos con Covid-19. Dos ensayos clínicos evaluaron la suplementación con vitamina D, mostrando disminución en las variables de respuesta (interleucina 6, ferritina y PCR), mientras que el tercero evaluó la vitamina C con relación al ingreso de pacientes a la UCI.

Conclusiones: con la escasa evidencia encontrada no es posible afirmar la idea que los micronutrientes estudiados ayudan a disminuir la concentración de marcadores inflamatorios.

 

Palabras clave: Covid-19; Marcadores Inflamatorios; Vitamina D; Vitamina C; Interleucina-6; Suplementación Tratamiento.

 

 

 

INTRODUCCIÓN

Originado en la ciudad de Wuhan, China en diciembre del 2019, rápidamente se expandió por todo el mundo.(1,2) Esta pandemia es provocada por un tipo de coronavirus que pertenece a la familia coronavidae(3,4) que causan enfermedades como una gripe común hasta cuadros más graves como el Síndrome Respiratorio de Oriente Medio (MERS-CoV)(5) y el Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS-CoV).(6) Actualmente se conocen cuatro géneros: alfa, beta, gamma y delta, de los cuales los dos primeros pueden infectar al humano. En efecto, el recientemente descubierto Covid-19 pertenece a la beta coronavirus.(7,8) El virus tiene como hábitat las diferentes secreciones mucosas, en donde la principal vía de trasmisión son las gotitas a través de la vía aérea(9) al haber tenido contacto estrecho con un infectante.(10) La propagación de este virus es demasiado rápida por lo que han surgido estrategias para controlar su transmisión a través de la búsqueda activa de casos(11) como el test de saliva, hisopado nasofaríngeo u orofaríngeo, test de detección de anticuerpos (IgG y IgM) y anticuerpos totales (Ab).(12,13)

De acuerdo con los estudios disponibles, el Covid-19 logra infectar a un sujeto uniéndose a la Enzima Convertidora de Angiotensina II (ACE 2), esta enzima es un receptor altamente capacitado para la adherencia del virus produciendo mayor gravedad en la dificultad respiratoria(14,15,16) comprometiendo órganos importantes como corazón, pulmones, intestino y riñón.(17) Hasta el momento no se sabe bien la causa de la hiperinflamación provocada por Covid-19, pero la hipótesis de una mayor carga viral que puede explicar este fenómeno. (18) Una de las consecuencias de Covid-19, es la fibrosis pulmonar asociada a una disfunción pulmonar que resulta ser irreversible,(19,20) y una de las herramientas que es esencial para la detección de la enfermedad es la tomografía computarizada de alta resolución, (21) se dice que un número significativo de pacientes contagiados tendrá este tipo de secuelas.(19)

La terapia de apoyo de suplementos de vitaminas C y D podrían usarse para mitigar la infección por Covid-19.(22) Por ejemplo; un tratamiento intravenoso con altas dosis de vitamina C ha mostrado efectos beneficiosos sobre la sepsis y shock séptico(23,24) la vitamina D juega un papel antiinflamatorio,(25) asiste a la inmunidad y también permite controlar reacciones oxidativas contra Covid-19,(26,27,28) por ende, la administración de vitaminas es beneficiosas para mejorar la inmunidad de los pacientes Covid-19.(29) Por otro lado, se plantea que el Zinc inhibe los pasos de la replicación del Covid-19 dependientes del pH;(30) mientras que el Selenio contribuye a una respuesta inmune y función antioxidante.(31)

Hasta donde sabemos existen revisiones sistemáticas que involucran suplementación de micronutrientes como prevención del Covid-19,(32) sin embargo, hasta donde se pudo buscar no se han encontrado revisiones sistemáticas que abarquen la suplementación de vitamina C y D, Selenio y Zinc durante la exposición al Covid-19. Es por ello que se pretende caracterizar la efectividad de micronutrientes suplementados sobre marcadores inflamatorios en pacientes con Covid-19.

 

MÉTODOS

Diseño

Revisión sistemática fue basada en ensayos clínicos bajo términos de los ítems de Preferred Reporting Items For Systematic Reviews and Meta-Analyses (PRISMA).(33)

 

Criterios de elegibilidad

Se estudiaron ensayos clínicos que analizaron a pacientes mayores de 18 años hospitalizados con una duración desde 7 días, con diagnóstico clínico de Covid-19 requirieron apoyo respiratorio invasivo y que tuvieron un riesgo de ser derivados a UCI. Se admitieron ensayos clínicos con enmascaramiento y abiertos. Se incluyeron ensayos clínicos que hayan aplicado suplementación con los siguientes micronutrientes: vitaminas Zinc (μg/dL), Selenio (μg/dL), vitaminas C (μg/dL) y D (μg/dL) para mitigar los síntomas la infección por Covid-19. El grupo de comparación fueron pacientes con similares características de gravedad, pero que se les aplicaron un tratamiento de cuidado intensivo estándar sin la incorporación de los suplementos mencionados anteriormente. Se consideraron ensayos clínicos con un tiempo de intervención mínimo de 7 días y con la variable outcome con el marcador inflamatorio de interleucina-6, ferritina y PCR.

 

Estrategia de Búsqueda

Se diseñó una estrategia de búsqueda que incluyó a descriptores controlados extraídos de Medical Subject Heading (Mesh) y palabras no controladas con relación al tema. El total de las palabras claves incluidas abarcaron todos los términos de la pregunta de formato de pacientes, intervención, comparación y outcome: PICO disponible en tabla 1. Se utilizaron bases de datos electrónicas: Scopus, PubMed, Web of Science, Cochrane Library y Proquest. Además, se buscó ensayos clínicos en el proceso de diseño o implementación con ClinicalTrials.gov. No se discriminó por idiomas ni antigüedad.

 

Tabla 1. Palabras clave en formato PICO

Estrategia

Palabras claves de uso libre

Palabras claves controlado por Mesh

Paciente                  

“Mechanic ventilation”

“Respiratory infection”

“Tracheotomy”

“Wuhan”

“Hospitalized”

 

 

 

 

“Covid-19”

“Virus”

“Signs”

“SARS-CoV-2” “Pathology”

“Pandemic”

“Inflammation”

“Intensive care”

“Intensive care unit”

“Intubation”

“coronaviruses”

Intervención

“Supplementation”

“Redox potential”

“Intravenous treatment”

“Immunity”

“Deficiency”

“Cofactor”

“Critical nutrient”

“Disease”

“Nutrition”

“Micronutrients”

“Vitamins”

“Vitamin D”

“Vitamin C”

“Minerals”

“Selenium”

“Zinc”

“Treatment”

“Quarantine”

“Cholecalciferol”

“Ascorbic acid”

 “Zinc oxide”

“Trace elements”

Control

“Control group”

“Therapy”

Outcome

“Inflammatory markers”

“Anti-inflammatory activity”

“Hyperinflammation”

“Interleucina-6”

“Recovery”

“Macrophages”

“T cells”

“B cells”

“Immunity”

“Inhibitors”

“Chemical analysis of blond”

 

Selección de los estudios

Dos revisoras independientes previamente entrenadas (VR y LQ), analizaron el título y el resumen de los ensayos clínico con relación al tema tratado de acuerdo con los criterios de elegibilidad previamente especificados. Estas dos investigadoras clasificaron los ensayos clínicos en una de las siguientes tres categorías: “incluido”, “excluido” o “dudoso”.  Los dudosos serán reclasificados “incluido” o “excluido luego de una segunda lectura individual de título y resumen. Una vez concluida esta actividad se abrieron los resultados de ambas evaluadoras y en aquellos casos de diferencias en la calificación una tercera investigadora (NS) ayudó a generar una categorización por consenso. Luego, hubo una segunda revisión a texto completo por las mismas dos revisoras previamente señaladas y se repetirá el modo de selección de los ensayos clínicos elegibles para este estudio. Se aplicó la pauta CONSORT (Consolidated Standards of Reporting Trials) (34) para facilitar la lectura crítica de los ensayos clínicos.

 

Extracción de los Datos

Las mismas dos revisoras antes descritas extrajeron de los ensayos clínicos seleccionados características del estudio como: a) primer autor y año; b) tipo de estudio, tamaño muestral, características de los participantes (sexo, edad, tiempo de hospitalización, comorbilidad) lugar; c) características en el grupo intervenido y grupo control, tiempo de intervención; d) tamaño de efecto de la intervención. Potenciales desacuerdos en el contenido de las tablas que se instauraron las dos revisoras independientes serán solucionados mediante el consenso con una tercera investigadora (NS).

 

Calidad de la evidencia para evitar sesgos en los estudios individuales

Cada investigadora de forma individual (VR y LQ) evaluó la presencia de potenciales  riesgos de sesgos: selección, realización, detección, desgaste y notificación, a través del análisis de los seis dominios que reporta la colaboración Cochrane:(35) Generación de la secuencia de aleatorización ocultamiento de la secuencia de aleatorización, ciego de los participantes de los investigadores y el personal sanitario, ciego de los evaluadores de desenlaces, perdida del seguimiento de los pacientes y reporte selectivo de desenlace. Aquí se calificó a cada sesgo como: “bajo”, “alto” o “no claro” y potenciales disensos fueron solucionados luego del análisis de las dos versiones con ayuda de una tercera investigadora (NS).

 

Síntesis de los datos

Se efectuó un resumen cuantitativo de la evidencia, debido a que los estudios que se encontraron no fueron suficientes para comparar las variables de respuesta (con unidades de medida que no se lograron convertir a una sola), del mismo modo planteaban intervenciones diferentes, por lo que realizar un metaanálisis no fue viable para esta revisión sistemática.

 

RESULTADOS

Resultados de Búsqueda

El proceso de búsqueda de artículos elegibles se presenta en la figura 1. De un total de 3 059 registros identificados, fueron estudiados sus títulos 2 741 y quedaron disponibles para una lectura completa 17 estudios, de los cuales 3 de ellos quedaron incluidos en esta revisión sistemática; sin embargo, se pretendía estudiar otros micronutrientes de interés como el Selenio y Zinc, pero solo se encontraron evidencia para tratamientos orales con vitamina C y D.

 

Figura 1. Diagrama de flujo(36)

 

Características de los estudios incluidos

Las principales características de los estudios incluidos están disponibles en la tabla 1. Los estudios se realizaron en España,(37) India(38) y China.(39) Dos estudios informaron los promedios de edad (en torno a los 50 años) y porcentajes de mujeres (46 % y 34 %, respectivamente) en los grupos asignados,(37,38) mientras que el tercer estudio no informó estos antecedentes(39) (tabla 1).

Las intervenciones aplicadas duraron entre 7(39) y 14 días,(38) sin embargo, Entrenas et al.(37) tuvo un tiempo variable según la evolución clínica de los pacientes.

Tanto Entrenas M. et al.(37) como Lakkireddy M. et al.(38) evaluaron la suplementación con colecalciferol (vitamina D) a través de tratamiento oral con 0,266 mg de colecalciferol en los días 3 y 7;(37) el segundo con tratamiento oral diaria dirigida de 60,000 UI (1,50 mg).(38) Liu F. et al.(39) describió una intervención con vitamina C con una dilución de 12 g de Vitamina C en agua estéril hasta completar un volumen de 50 ml y se infundirán en un plazo de 4 hr por medio de la bomba de infusión (tabla 1).

 

Tabla 1. Características de los estudios incluidos

Apellido primer autor; año

Diseño y objetivo

Participantes

Intervención

Tiempo de intervención

Resultados

Entrenas M; 2020

Diseño: Estudio clínico piloto paralelo, aleatorizado, abierto, de doble máscara.

Objetivo:

 evaluar si el colecalciferol puede reducir la necesidad de ingreso a la UCI y la muerte relacionada, como parte anterior del ensayo clínico Covidiol (Prevención y tratamiento con colecalciferol de la enfermedad aguda inducida por coronavirus). síndrome respiratorio (SARS) COVID-19 (COVIDIOL) ”(NCT04366908)) y facilitar el cálculo de la muestra.

Muestra inicial Intervención:50

Control:26

Edad Media:

Intervención: 53,1±10,7

Control: 52,7±9,3

Porcentaje de mujeres:

Intervención: 46 %

Control: 31 %

Porcentaje de hombres:

Intervención:54 %

Control: 69 %

Córdoba, España

Grupo intervenido:

Tratamiento oral con 0,266 mg de colecalciferol en los días 3 y 7, y luego semanalmente hasta el alta o la admisión en la UCI.

 

Grupo control:

Atención estándar

una combinación de hidroxicloroquina (400 mg cada 12 h el primer día y 200 mg cada 12 h durante los siguientes 5 días), azitromicina ( 500 mg por vía oral durante 5 días

Es variable según evolución clínica del paciente.

Tasa de ingresos en UCI y mortalidad.

Lakkireddy M; 2021

Diseño: ensayo clínico intervencionista de asignación paralela, prospectivo, aleatorizado, prospectivo y abierto

Objetivo:

Investigar objetivamente el papel de la vitamina D y el impacto de la terapia Pulso D en la reducción de los biomarcadores inflamatorios de COVID-19. investigar objetivamente el papel de la vitamina D y el impacto de la terapia Pulso D en la reducción de los biomarcadores inflamatorios de COVID-19.

Muestra inicial Intervención:44

Control:43

Edad Media:

Intervención:47 ± 12

Control:44 ± 14

Porcentaje de mujeres:

Intervención: 34,0 %

Control: 34,8 %

Porcentaje de hombres:

Intervención:

Control:

Hyderabad, India

Grupo intervenido:

 

 Suplementación oral diaria dirigida de 60,000 UI (1,50 mg) de vitamina D según el IMC del sujeto y tratamiento estándar para Covid-19.

 

Grupo control:

Tratamiento estándar solo / grupo sin vitamina D.

 14 días

IL-6 (pg / mL):

Disminución del grupo intervenido:

13(2 a 46)**

 

Disminución del grupo control:

 0,5 (-7 a 4)**

 

PCR (mg/L):

Disminución del grupo intervenido:

51 (10 a 113)**

 

Disminución del grupo control:

5 (-3 a 39)**

 

Ferritina (ng/mL)

Disminución del grupo intervenido:

84 (8 a 268)**

 

Disminución del grupo control:

11 (11 a 55)**

 

Los resultados corresponden a mediciones pre-post.

Liu F; 2020

Diseño: aleatorizado controlado con placebo y de dos brazos.

Objetivo: investigar una nueva terapia potencial

para COVID-19 aclarando el efecto de HIVC en el pronóstico

de pacientes con COVID-19, especialmente en la función

respiratoria evaluada por días sin ventilación.

Muestra inicial Intervención: no informado

Control: no informado

Edad Media:

Intervención: no informado

Control: no informado

Porcentaje de mujeres:

Intervención: no informado

Control: no informado

Porcentaje de hombres:

Intervención: no informado

Control: no informado

Wuhan, China

Grupo intervenido:

 

Dilución de 12 g de Vitamina C en agua estéril hasta un volumen de 50 ml y se infundirán en un plazo de 4 hrs por medio de la bomba de infusión. Se repite cada 12 hrs. (en total 24 gr de veces por día).

 

Grupo control: placebo (50 ml de agua esterilizada) se infundirán en un plazo de 4 horas mediante una bomba de infusión.

7 días 

Los resultados del PCR y Interleucina-6 mostraron un cambio en los biomarcadores inflamatorios, pero no se señala si aumentó o disminuyó

 

Los autores no informan datos numéricos en el estudio.

* media aritmética ± desviación estándar; ** mediana (rango intercuartil)

 

De los estudios que intervinieron con vitamina D los resultados de IL-6 que evidencia el estudio de Lakkireddy M. et al.(38) demostró una disminución de 13 pg/mL en relación con el pre – post intervención, comparado con el control que solo fue de 0,5 pg/mL. No obstante, a lo anterior, el rango normal para IL-6 es de 17,0 pg/ml.  (tabla 1)

Ahora, en el caso de PCR y ferritina, también mostraron disminuciones significativas de p=0,0001 para PCR y p=0,008 para ferritina, en relación con el grupo intervenido versus el grupo control. A su vez los valores normales de PCR <1 mg/dl normal, 1- 10 mg/dl elevación moderada y >10 mg/dl elevación marcada,(40) valores normales en suero de Ferritina en mujeres 30–200 ng/mL y hombres 30–300 ng/mL(41). (tabla 1)

Entrenas M. et al.(37) expuso resultados dirigidos a la tasa de ingresos y mortalidad en la unidad de cuidados intensivos entre los pacientes hospitalizados por Covid-19, demostró que la terapia con vitamina D fue efectiva porque los sujetos con la intervención ninguno falleció, solo 1 sujeto necesitó el ingreso a UCI.

Por último, en el caso de Liu F. et al.(39) menciono de manera cualitativa que sus resultados de PCR e Interleucina-6 mostraron un cambio en los biomarcadores inflamatorios, sin mencionar si estos aumentaron o disminuyeron.

 

Riesgo de sesgo

Al evaluar los seis dominios de riesgo de sesgos, la figura 2 presenta que 66,6 % de los estudios que entraron a esta RS. Fueron calificados con “bajo” riesgo de sesgo en relación con el dominio de selección, desempeño, detección y reporte, mientras que el 100 % de los estudios tuvo bajo riesgo de sesgo en el dominio de desgaste.

El 33,3 % de los estudios mostró riesgo de sesgo “poco claro” en los dominios de selección y detección. Se obtuvo el mismo porcentaje para el riesgo de sesgo “alto” en los dominios de desempeño y reporte.

 

Figura 2. Porcentajes de estudios según clasificación de “alto”, “bajo” o “no claro” riesgo de sesgo

 

En la figura 3 se indica que los estudios de Liu F. et al.(39) y Entrenas M. et al.(37) presentaron “bajo” riesgo en casi la totalidad de los dominios, exceptuando por el sesgo de reporte que se presentó “alto”, debido a que los resultados obtenidos no tienen un respaldo con evidencia (sólo plantearon un resumen cualitativo de resultados), y el sesgo de detección de Entrenas et al(37) que evidenció un riesgo de sesgo “poco claro”, porque existió una falta de información para discernir si hubo cegamiento en los resultados, respectivamente.

Por otro lado, si bien Lakkireddy M. et al.(38) mostró “bajo” riesgo en el dominio de detección y reporte, se calificó como “alto” el riesgo en el sesgo de desempeño debido a que este estudio no hubo ciego entre los participantes, investigadores ni del personal sanitario. La generación de la secuencia de aleatorización fue evaluada como “poco claro”, debido a que no especificaron si fue centralizado o se utilizó algún otro método equivalente. Aun cuando se tienen estos antecedentes, de igual manera fue incorporado a esta revisión sistemática puesto que contiene resultados de las variables de respuesta estudiadas.

 

Figura 3. Calificación de riesgo de sesgo evaluado en cada estudio a partir de los seis dominios propuestos por la Colaboración Cochrane

 

DISCUSIÓN

En primer lugar, se planteó como expectativa analizar y discutir suplementaciones nutricionales de Zinc, Selenio, vitaminas C y D; sin embargo, luego de haber aplicado criterios rigurosos en bases de datos electrónicas de alto alcance solo se encontró evidencia de vitaminas C y D. La novedad de la enfermedad, la ventana de tiempo y la búsqueda de sólo ensayos clínicos (por la calidad de evidencia que aportan) fueron factores que contribuyeron a tal volumen de evidencia. En efecto, una RS anterior a la nuestra publicada en 2021 no logró encontrar artículos que permitieran sustentar la hipótesis que el tratamiento con vitamina C suplementada sobre pacientes con covid-19 tenga o no efectividad.(42)

En relación con la efectividad de la suplementación con Vitamina D sobre IL-6, PCR y ferritina, encontramos un estudio disponible,(38) el cual deja en evidencia que el tratamiento para hipovitaminosis D, la terapia de Pulse D, donde se administran altas dosis de vitamina D 60,000 UI por un periodo de 8 días para aquellos pacientes que tengan un IMC entre los 18,5-25 kg/mt2 y 10 días para aquellos que tengan un IMC>25 kg/mt2 logra disminuir valores de estas tres variables de respuesta. Estos resultados pueden explicarse debido al tiempo y dosis de intervención utilizada, puesto que la recomendación para la población sana (estadounidense) es de 600 UI en menores de 70 años y 800 en mayores de 80 años,(43) por  lo tanto se planteó una intervención 100 veces mayor a la dosis diaria recomendada. Por otro lado, la deficiencia de vitamina D, es asociada a mayor riesgo de adquirir Covid-19 debido al papel antinflamatorio e inmunomodulador, favoreciendo la fagocitosis y la acción microbicida, por esto que su deficiencia podría aumentar los valores de los marcadores inflamatorios. (44)

En el caso de Lakkireddy M. et al.(38) en el grupo con Vitamina D requirieron apoyo en cuidados intensivos (UCI) 4 sujetos del grupo de intervención, en cambio en el grupo control ingresaron 5 sujetos; mientras que en el estudio de Entrenas et al(37) demostraron que no hubo necesidad de ingresar pacientes a UCI, a diferencia del grupo control que señaló a 13 sujetos que ingresaron a la UCI. Esto podría deberse a uno de los mecanismos de la vitamina D para potenciar el sistema inmunológico, es la reducción de las citocinas proinflamatorias, moderando la respuesta inmunitaria responsable de neumonías, además se entiende que el Covid-19 provoca un daño a nivel de las células epiteliales propiciando el desarrollo de la neumonía donde hay una mayor producción de citoquinas, entonces se puede decir que al usar vitamina D, está puede disminuir la respuesta inmunitaria.(45)

En cuanto a la vitamina C, se considera un excelente antioxidante con propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias, ayudando así a la función inmune para mejorar las infecciones. La evidencia de Lui F. et al.(39) indicó que la vitamina C intravenosa contribuye a una elevada respuesta antiinflamatoria,(46) según Feyaerts AF. et al.(47) podría afirmar que la suplementación con la vitamina C disminuye la IL-6 y bloquea la liberación de esta interleucina, por otro lado, el PCR disminuye la inflamación reduciendo la secreción de citoquinas proinflamatorias;(48) La interacción entre la vitamina C y la ferritina aumentan los niveles de este marcador inflamatorio.(46)

La IL-6 es una citoquina proinflamatoria(49) y multifuncional producida por una variedad de tipos de células, cuyos niveles séricos están elevados en diversos trastornos inflamatorios y autoinmunes.(50) En particular, los niveles de interleucina-6 en sangre (IL-6) están directamente correlacionados con la gravedad de COVID-19 y se han considerado un biomarcador independiente para predecir un mal pronóstico.(51)

La PCR desempeña un papel importante en el proceso inflamatorio, ya que reacciona con receptores de la superficie celular, facilitando la opsonización y fagocitosis(52) su deficiencia facilita el desarrollo de fenómenos de autoinmunidad,(53) además es sabido que el PCR disminuye cuando la infección comienza a desaparecer, ya que tiene una semivida entre 4-9 horas.(54)

Los niveles de ferritina sérica se incrementan en procesos inflamatorios agudos, las citosinas inflamatorias pueden inducir la expresión de ferritina y la ferritina induce la producción de mayores citocinas antiinflamatorias como la IL-10; por lo tanto, la ferritina es un mecanismo inmunosupresor importante, por medio de lo que parece ser una compleja interacción entre ferritina y citocinas en el control de mediadores inflamatorios, antiinflamatorios y marcador en el enfermo grave.(55) Además, la ferritina es un mediador claro de la desregulación inmunológica desencadenando una tormenta de citocinas cuando esta se encuentra elevada(56) ferritina elevada en estos estados refleja un mayor almacenamiento corporal total de hierro, pero estas reservas no están disponibles para la hematopoyesis.(57) La hiperferritinemia(58) iniciada por la inflamación excesiva por la infección se asocia con el ingreso a la unidad de cuidados intensivos y la alta mortalidad, y representa una señal para distinguir a los pacientes de alto riesgo para orientar la intervención terapéutica para el control de la inflamación.(59)

Este estudio no ha estado ajeno a limitaciones. La primera es la escasa cantidad de artículos disponibles, lo que dificulta la preparación de una síntesis cuantitativa de datos y el resumen cualitativo de la evidencia, ya que esta dificultad trae consigo la escasa capacidad de contrastar la evidencia con más estudios, sumado a que cada ensayo clínico responde a variables de respuestas diferentes, de modo que no se logró crear un panorama global del problema. No obstante, creemos que este estudio plantea de forma realista la evidencia acumulada con relación a este tema y por tanto permite animar a investigadores iniciar estudios de este tipo para evidenciar la función que ejerce la suplementación en este tipo de pacientes.

 

CONCLUSIONES

La evidencia que existe aún sigue siendo escasa, pero hasta ahora coincide que la suplementación de vitaminas C y D en pacientes con Covid-19, logran reducir las variables de respuesta (Interleucina-6, PCR y ferritina). Además, se demostró que en uno de los estudios la suplementación con vitamina D, pudo reducir los días UCI de los pacientes. Sin embargo, esta información sigue siendo escasa, por lo que se necesita más de ella para poder reafirmar lo expuesto en esta RS.

 

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FINANCIACIÓN

Ninguna.

 

CONFLICTO DE INTERESES

Ninguno.

 

CONTRIBUCIÓN DE AUTORÍA

Conceptualización: Valentina Rail, Nicole Seguel, Laura Quezada, Miguel Ángel López-Espinoza.

Investigación: Valentina Rail, Nicole Seguel, Laura Quezada, Miguel Ángel López-Espinoza.

Redacción – borrador original: Valentina Rail, Nicole Seguel, Laura Quezada, Miguel Ángel López-Espinoza.

Redacción – revisión y edición: Valentina Rail, Nicole Seguel, Laura Quezada, Miguel Ángel López-Espinoza.